El texto de la memoria simbólica que acompaña el mural realizado por el artista Martín La Spina en la sede de nuestro casal nos adentra en los significados e intenciones plasmados en esta obra, condensando en una imagen tipo “pictograma” una serie de ideas descritas por el artista:
El Drac:
Por una parte, la imagen refiere, en una forma semifigurativa, a una “Bèstia de Foc”, que se asocia a la idea de las fiestas populares, los “correfocs”, y las celebraciones en las que estos animales fantásticos son liberados por una noche y luchan por su supremacía y dominio entre el pueblo, generándose un encuentro pícaro y simbólico, una danza ritual, un recuerdo de lo ancestral, de lo mítico, una liberación de una energía popular. Para mí, esta figura representa la fuerza del pueblo catalán, que lucha por su independencia y autodeterminación. El dragón que he diseñado está en marcha (de izquierda a derecha, en el sentido de la lectura) y se dirige hacia el interior del Casal, como buscando sus raíces, como invitando a entrar, y tiene la boca abierta, no es un animal ni mudo ni sumiso… Esta figura, también tiene obvia vinculación con Sant Jordi, “Patró de Catalunya”, y con toda la iconografía del bestiario medieval que tan vivamente atesora Catalunya, y que se vuelve a retomar con fuerza en el Modernismo. Es, por tanto, un arquetipo que enlaza varias épocas y conceptos. La línea sinuosa que lo compone es traída originalmente del gótico, pero también, y sobre todo, del “modernisme”. La técnica del “trencadis” con la que está planteada la obra, remite fuertemente al período modernista catalán, y la utilización de materiales reciclados de la Catalunya industrial como son el vidrio y la cerámica, tan referenciadas en las obras de Gaudí y Jujol, entre otros.
La Rosa:
Otro símbolo que compone la imagen es la rosa, que es enlazada por la cola del dragón. La rosa roja, unida a la tradición de San Jordi, es la que produjo el rosal que brota de la sangre del dragón. Para mí, este simbolismo tan profundo expresa que de la lucha surge una nueva criatura bella y frágil, concéntrica; y el profundo y polisémico significado de la rosa es ya del acervo universal.
El simbolismo de los colores:
El Drac está atravesado por los colores rojo y amarillo de la “senyera” nacional catalana, y el azul y blanco de nuestra bandera nacional argentina. Por momentos, esos colores se dividen y muestran en la clara identificación de las dos banderas, por momentos hay transiciones que representan la hermandad de los dos pueblos. A su vez, la suma de los tres colores primarios: rojo, amarillo y azul que componen el pictograma, da cuenta en esta síntesis en forma de Tríada, de todos los colores posibles. El fondo estará trabajado con mosaico de cerámicas, mayormente blancas, de piezas rotas y recicladas (platos, tazas, etc), que fueron aportadas por quienes quisieron tomar parte simbólica en la construcción de esta obra, con recuerdos de la vida familiar, que representan los platos, tazas y demás elementos cerámicos donados por la comunidad que fueron utilizados. Junto con ellos, aparecen dos frases que se repiten dentro del fondo: “Un poble de bona gent” y “arrels”. Dos conceptos que fueron seleccionados también por la comunidad del Casal de La Plata para integrarse a la obra.
Datos técnicos de la obra:
Autor: Martín La Spina
Técnica: mosaico vítreo y cerámico sobre placa de fibrocemento recubierta de aluminio.
Dimensiones: 220 x 240 cms.
Año de realización: Septiembre 2020 a Febrero 2021
Emplazamiento: 11 de Septiembre de 2021
Ubicación: Casal de Catalunya, La Plata, Buenos Aires, Argentina.
Compartimos con ustedes esta excelente publicación del portal Objetos con vidrio, escrita por María Eugenia Diaz de Vivar, sobre La Bèstia del Foc, la obra mural de Martín La Spina que engalana el hall de nuestra sede.
